domingo, 7 de septiembre de 2008

La nueva gestión en Oncología

El cuidado del paciente con cáncer ha variado en los últimos años, y gracias al mayor conocimiento en el campo de la biología, clínica, cirugía, radiología/radioterapia y farmacología se convirtió en un segmento diagnóstico muy complejo de entender y manejar aún para médicos especializados.


Una de las dificultades que alcanzan a todos los países, obviamente en diferente medida, es el manejo de los recursos para que los pacientes reciban las terapias necesarias en tiempo y forma.


Los sistemas públicos y no públicos de salud, suelen coordinar la asistencia de sus pacientes, pero no siempre logran los mejores resultados.


Las distancias entre el lugar de residencia y el de atención, el desconocimiento de las patologías tumorales por los médicos de la primera línea asistencial y el factor tiempo entre la primer consulta y el inicio de tratamiento adecuado son parte importante de las dificultades para mejorar los resultados. Pero resolverlo no insume mayores costos.


La nueva gestión en Oncología, debe reorganizar toda la prestación que cualquier persona con diagnóstico de cáncer pueda requerir, dando nuevas prioridades y orden al manejo de recursos de todo tipo, que en Argentina existen, sin duda alguna.


Es interesante estudiar lo que se hace en otros países de Europa, Norteamérica, Sudamérica, para poder en la medida de cada posibilidad ofrecer el estándar de cuidado a cada enfermo, buscando equidad en el acceso al sistema de salud, sin demoras facilitando su chance de cura o control prolongado.


El costo de este cuidado es hoy altísimo y todas las publicaciones mundiales que reveen el tema explican claramente cómo los aumentos del costo sanitario están siempre por delante y arriba de la inflación. El advenimiento de nuevas técnicas diagnósticas de todo tipo, nuevas terapéuticas farmacológicas y radiantes, incrementa el costo promedio por ciclo de tratamiento/paciente, y algunas terapias se ofrecen por tiempos prolongados, a veces medidos en años.


La redistribución de la tarea asistencial en los mejores prestadores, la educación de los grupos de mayor riesgo, la información para el cambio de los hábitos con conocida relación al cáncer, la capacitación continua del personal médico y no médico que trabaja en las redes de salud, y la normatización de la estadificación y la terapéutica, entre otra medidas básicas no es costoso, y sólo trae beneficios, disminución de costos y mejoras en los resultados del área Oncología.


Quien debe reorganizar esta tarea en cada sistema de salud es un Oncólogo Clínico con formación integral en la especialidad, abarcando desde la tarea preventiva cuando existe, el diagnóstico oportuno, la rápida posibilidad de tratamiento efectivo, el manejo de las complicaciones, el control a largo plazo de los sobrevividores, la terapia paliativa de lo que no logran la cura, el manejo de los costos, con un fuerte racional académico que le permita comprender cuál es la necesidad real del paciente, familia, médico e institución. Esta figura en algunas redes se conoce como Cancer Manager.


CLINON es un grupo de trabajo pequeño, formado por médicos, enfermeros, y personal administrativo con experiencia en salud, dedicado sólo a la Oncología, que reúne a Oncólogos Clínicos y Hematólogos bien formados y experimentados en el cuidado del paciente portador de neoplasia. Yo, Alejandro Turek, médico especializado en Oncología Clínica lo coordino, y a partir de hoy periódicamente voy a subir material sobre este tema al blog para facilitar información a quien la necesite. Mi perfil público en LinkedIn: http://www.linkedin.com/in/alejandroturek

Respecto de los costos del cuidado del cáncer

Existen estudios disponibles, de fuentes y autores que merecen crédito, en los que se muestra un costo diferente por diagnóstico, estadio o fase de enfermedad y sexo.
Vemos un buen ejemplo en los datos del Instituto del Cáncer de los Estados Unidos de Norteamérica, publicados en Abril 2008 (Journal of the National Cancer Institute), sobre 700.000 personas con diagnóstico de cáncer, a partir de la información cargada en el sistema database del Medicare, sobre 18 tipos tumorales diferentes. Se estudió el período 1973-2003 y también separaron los pacientes de >65 (gerontes por definición) durante 1999-2003. El estudio pretendió saber cuánto se gastaba por paciente a partir del diagnóstico de certeza en la atención de los casos relacionando gasto con el momento clínico de la asistencia.
En la población Medicare pudieron hacer el cálculo del costo por 5 años.

Dividieron las fases de la siguiente manera:

Fase inicial: el año posterior al diagnóstico
Ultimo año de vida: los 12 meses finales hasta el óbito
Fase continua: el tiempo entre las otras dos fases

¿Qué encontraron?
El gasto más alto (U$21.1 billones de dólares) se gastó en los mayores de 65 años, y entre los tumores que generaron mayor costo, listaron el cáncer pulmonar, el colorectal y el prostático. Y los tumores del sistema nervioso central fueron los más costosos.
El gasto mayor se da en las fases iniciales y finales (algunas citas afirman que en esta fase se llega a gastar 6 veces más que en todos los años previos de evolución de un paciente) y el gasto menor se vió en la fase intermedia o continua. Llama la atención que el cáncer de ovario fuera el más costoso entre las mujeres.
Entonces, reveer por grupo etario y sexo, es tan importante, como dividir los diagnósticos y estadios para la organización de los sistemas de salud. Es imperativo saber dónde la intervención es viable y ofrece un resultado positivo (en todos los términos); y cuánto es mucho cuando hablamos de dinero/paciente/ciclo de tratamiento, conociendo las prolongadas sobrevidas de enfermos con patología crónica no curable pero controlable a largo plazo.

No hay comentarios: